Los insectos, desde hace mucho tiempo, han sido atraídos por la luz. Esta acción ha llevado a millones de individuos a un destino de muerte. Y es que, al parecer, la luz es un elemento que inconscientemente los lleva hacia su final. Pero, ¿por qué los insectos van a la luz? En este artículo, hablaremos en profundidad sobre esta cuestión y analizaremos las diferentes teorías que intentan explicar este fenómeno.
Índice de contenidos
La luz y los insectos
Antes de adentrarnos en la explicación detrás de este curioso comportamiento, es importante que comprendamos cómo funciona la luz en el mundo de los insectos. La luz es uno de los elementos más importantes para los insectos, ya que les sirve como guía en su alimentación y apareamiento.
Los insectos, al igual que cualquier ser vivo, requieren de una cantidad adecuada de luz para llevar a cabo sus funciones diarias. La luz solar es la principal fuente de energía de los insectos, por lo que necesitan estar expuestos a ella por períodos determinados de tiempo para poder sobrevivir.

¿Por qué los insectos van a la luz?
Existen varias teorías que intentan explicar por qué los insectos van a la luz, algunas más respaldadas que otras. A continuación, analizaremos las más importantes:
Teoría de la navegación
Según esta teoría, los insectos utilizan la luz como un elemento de navegación. La luz solar es su principal fuente de dirección, por lo que cuando se encuentran en ambientes donde la fuente de luz es artificial, como puede ser una bombilla, se ven atraídos por ella como si fuera su guía natural.
Esta teoría se respalda en que los insectos revolotean alrededor de la fuente de luz, buscando algún tipo de coordenada que les permita dirigirse hacia su destino final. De esta forma, siguen este camino de luz con la esperanza de encontrar una salida, pero al final, se quedan atrapados en el mismo círculo de luz.
Teoría del apareamiento
La teoría del apareamiento sugiere que los insectos son atraídos por la luz debido a que es un elemento simbólico en su proceso de apareamiento. El apareamiento ocurre generalmente durante el día en la mayoría de las especies animales, por lo que la luz artificial es vista por los insectos como un sustituto del sol.
En este sentido, los insectos que utilizan la luz como una forma de cortejo sexual son atraídos por la fuente de luz, esperando encontrarse con una pareja con la que aparearse.
Teoría del camaleón
La teoría del camaleón se basa en el hecho de que los insectos son atraídos por la luz debido a que esta se asemeja a su entorno natural. Los insectos tienen la capacidad de camuflarse y adaptarse a su entorno, por lo que se ven atraídos por cualquier elemento que pueda simular su ambiente natural.
De esta forma, la fuente de luz artificial asemeja a un sol resplandeciente en la oscuridad, llevando a los insectos a sentirse más cómodos y seguros en su entorno.
Teoría de la confusión visual
La teoría de la confusión visual es quizás la más popular y respaldada por la comunidad científica. Según esta teoría, los insectos son atraídos por la luz debido a que su sistema visual se ve confundido por ella.
Los insectos utilizan su sistema visual para detectar la polarización de la luz solar, lo que les permite orientarse en el ambiente y para detectar a sus depredadores. Sin embargo, las fuentes de luz artificial no emiten esa misma polarización, lo que lleva a los insectos a pensar que están viendo algo completamente diferente.
De esta forma, los insectos quedan atrapados en el círculo de luz, confundidos por algo que no pueden entender, y que les indica que tienen que seguir volando en el sopor de la noche.
¿Cómo afecta esto a los humanos?
Aunque el comportamiento de los insectos hacia la luz puede parecer algo inofensivo, en realidad puede tener grandes repercusiones para los humanos. En primer lugar, los insectos que se ven atraídos por la luz suelen chocar contra ella, por lo que pueden dañar las luces y las estaciones de energía eléctrica.
Además, los insectos que se quedan atrapados en la luz pueden ser una fuente de infección y enfermedades, ya que pueden contaminar el ambiente y transmitir bacterias y virus a los humanos.
Nota final
aunque aún no se ha determinado con exactitud por qué los insectos van a la luz, hay varias teorías interesantes que lo explican. Algunas teorías sugieren que los insectos utilizan la luz como referencia, mientras que otras se basan en la anatomía y fisiología de los insectos.
En cualquier caso, es importante que recordemos que este comportamiento puede tener grandes consecuencias para los seres humanos, por lo que debemos tomar medidas para evitar los conflictos entre los insectos y la luz.