Las tortugas marinas son animales impresionantes. Son una especie antiquísima, que ha sobrevivido a lo largo de millones de años y se adapta a múltiples ecosistemas. A pesar de su grandeza, las tortugas marinas son herbívoras, y comen principalmente algas y vegetación marina.
Índice de contenidos
La dieta de las tortugas marinas
Las tortugas marinas suelen alimentarse en aguas poco profundas, donde encuentran su alimento preferido, las algas marinas. Sin embargo, también pueden comer otros tipos de vegetación acuática, y en algunos casos, animales marinos como crustáceos o medusas.
Tipos de alimentación
Existen siete especies de tortugas marinas, y aunque todas comparten hábitos de alimentación similares, cada una tiene ciertas particularidades en su dieta. En general se pueden diferenciar dos tipos de alimentación en las tortugas marinas:
- Herbívoras
- Omnívoras
Las tortugas herbívoras se alimentan principalmente de plantas acuáticas, como algas, pastos marinos o hojas de mangle. Las tortugas omnívoras, por otro lado, pueden incluir en su dieta pequeños animales marinos, como crustáceos, moluscos o medusas.

Tortugas marinas herbívoras
Entre las especies de tortugas marinas herbívoras se encuentran las tortugas verdes (Chelonia mydas) y las tortugas carey (Eretmochelys imbricata).
Las tortugas verdes son las más grandes de todas las tortugas herbívoras. Pueden alcanzar los 1,5 metros de longitud y pesar hasta 300 kilos. Su dieta se basa principalmente en algas marinas. Las tortugas verdes pueden consumir varias especies de algas, pero tienen una alimentación preferida que es la alga verde llamada Ulva lactuca.
Las tortugas carey tienen una alimentación más variada. Además de las algas marinas, también se alimentan de esponjas, corales y otros invertebrados marinos. A pesar de esto, las algas son la mayor parte de su alimento. La tortuga carey prefiere consumir algas marrones y rojas.
Tortugas marinas omnívoras
Entre las especies de tortugas marinas omnívoras se encuentran la tortuga lora (Lepidochelys olivacea) y la tortuga cabezona (Caretta caretta).
La tortuga lora es la más pequeña de las tortugas marinas, y su dieta es principalmente carnívora y omnívora. Además de algas marinas, consume pequeños crustáceos, insectos marinos y medusas. La tortuga lora se alimenta en las zonas costeras, donde encuentra muchos de estos animales.
La tortuga cabezona es una de las tortugas marinas más grandes. Su dieta es mayoritariamente herbívora, pero también puede consumir pequeños animales marinos. En su dieta predominan las algas verdes. Durante su etapa juvenil, la tortuga cabezona suele alimentarse de medusas, pero a medida que crece, su alimentación se torna más herbívora.
La importancia de su alimentación
La alimentación de las tortugas marinas es vital para su supervivencia. Las tortugas herbívoras como las verdes, son importantes para mantener el equilibrio de los ecosistemas marinos, ya que controlan el crecimiento de las algas y la vegetación marina.
Además, muchos animales se alimentan de las tortugas marinas, por lo que mantener una población saludable, es garantizar la biodiversidad de los ecosistemas marinos.
Nota final
Las tortugas marinas son animales fascinantes, tanto por su tamaño como por su longevidad. Aunque muchas personas las asocian con una alimentación omnívora, lo cierto es que las tortugas marinas son principalmente herbívoras. Su alimentación es clave para mantener el equilibrio de los ecosistemas marinos, y por eso es importante proteger su hábitat y evitar la contaminación de las costas.