Enseñar a un cachorro a hacer sus necesidades en la calle es uno de los mayores retos que puede enfrentar un dueño de mascotas. Muchos propietarios se sienten abrumados y estresados por el proceso de entrenamiento, pero no tiene por qué ser así. Con un poco de paciencia y consistencia, puedes enseñarle a tu cachorro a hacer sus necesidades en la calle. En este artículo, exploraremos algunos consejos y estrategias para ayudarte a lograr este objetivo.
Índice de contenidos
Comprender el proceso de la eliminación de un cachorro
Antes de empezar a entrenar a tu cachorro, es importante que entiendas el proceso de eliminación de un cachorro. Cuando un cachorro necesita aliviarse, primero se siente inquieto y empieza a olfatear el suelo. A medida que se sienten más incómodos, empezarán a caminar y buscarán un lugar para hacer sus necesidades. Una vez que encuentran el lugar adecuado, se agachan y empiezan a hacer sus necesidades.
Existe una diferencia entre un cachorro y un perro adulto en este proceso de eliminación. Los cachorros no tienen control voluntario sobre su vejiga y sus intestinos antes de las 8 semanas de edad. A menudo, necesitan ir al baño después de unos 20-30 minutos de comer, jugar o dormir.
Crea un programa de entrenamiento
Para enseñar a tu cachorro a hacer sus necesidades en la calle, necesitas crear un programa de entrenamiento que sea consistente y estructurado. Deberás establecer horarios específicos para la comida, el agua y las caminatas. Trata de usar las mismas palabras para enseñarle a tu cachorro que es hora de ir al baño. «Vamos a hacer pipí» o «haz tus necesidades» son buenos ejemplos.

Recuerda, debes tener paciencia y ser constante. A menudo, los propietarios esperan que sus cachorros aprendan rápidamente, pero el entrenamiento lleva tiempo y requiere esfuerzo. Debes estar preparado para dedicar tiempo y esfuerzo para ayudar a tu cachorro a alcanzar el éxito.
Presta atención a las señales de tu cachorro
Cada cachorro es diferente y tiene diferentes formas de comunicarse con sus dueños. Presta atención a las señales de que tu cachorro necesita ir al baño. Si tu cachorro está ladrando, girando en círculos o caminando nerviosamente, pueden ser señales de que necesitan ir al baño. También hay cachorros que pueden rascar la puerta para indicar que necesitan salir.
Una vez que tu cachorro te haya indicado que necesita ir al baño, llévalo afuera inmediatamente. Deberás elegir un lugar específico en el patio o en la calle para que tu cachorro haga sus necesidades. Una vez que llegues a este lugar, dale a tu cachorro unas pocas palabras de aliento para que se sienta seguro y alentado a hacer sus necesidades.
Recompensa a tu cachorro con elogios y golosinas
El refuerzo positivo es esencial en el entrenamiento de un cachorro. Recompensa a tu cachorro cada vez que haga sus necesidades en el lugar adecuado. Puedes utilizar una voz feliz y emocionante para ofrecerle un refuerzo positivo a tu cachorro. También puedes ofrecerle golosinas, juguetes o caricias para reforzar este comportamiento. Esto incentivará a tu cachorro a seguir haciendo sus necesidades en el lugar correcto.
No castigues a tu cachorro por accidentes
Los accidentes en la casa son inevitables durante el proceso de entrenamiento. No castigues a tu cachorro por accidentes en la casa. Esto podría hacer que tu cachorro tenga miedo o ansiedad de hacer sus necesidades en tu presencia. En su lugar, limpia el accidente con un limpiador de enzimas y sigue adelante. Con paciencia y consistencia, los accidentes disminuirán y tu cachorro aprenderá a hacer sus necesidades en el lugar adecuado.
Limita el espacio disponible en casa
Es vital limitar el espacio disponible para tu cachorro en la casa para reducir la cantidad de lugares donde podría tener accidentes. Comienza limitando el espacio para que tu cachorro tenga acceso a un solo cuarto y continúa añadiendo más espacio a medida que tu cachorro siga mejorando.
Una manera de limitar su acceso es poner en un lugar específico a su perro cuando no puedas estar presente o para dormir. Una manera de hacerlo es tener una jaula para perro, con un espacio suficiente para que tu cachorro pueda darse la vuelta, acostarse y no ensuciar su espacio. La mayoría de los perros tienen una tendencia natural a no ensuciar su propia área de descanso, lo que puede ayudar en el proceso de entrenamiento.
Mantén un horario de comida y agua consistente
Es importante mantener un horario de comida y agua constante para que el proceso de eliminación de tu cachorro sea predecible y consistente. Alimenta a tu cachorro a la misma hora todos los días y asegúrate de que tenga agua fresca disponible en todo momento. Limita el acceso al agua antes de dormir y antes de salir a la calle para hacer pipí. Esto reducirá la cantidad de accidentes en la casa.
Sé consistente en tu entrenamiento
Recuerda, la consistencia es clave en el entrenamiento de un cachorro. Sigue el programa de entrenamiento que hayas creado y trata de ser lo más consistente posible. Usa las mismas palabras para indicar a tu cachorro que es hora de ir al baño y repite los horarios de comida y agua. Con el tiempo, tu cachorro aprenderá a asociar estas palabras y acciones con la necesidad de ir al baño.
Nota final
Enseñar a tu cachorro a hacer sus necesidades en la calle es un proceso que requiere tiempo, paciencia y esfuerzo. Crea un programa de entrenamiento consistente, presta atención a las señales y recompensa a tu cachorro por hacer las cosas correctamente. Recuerda, los accidentes son inevitables y necesitas ser paciente y consistente. Con el tiempo, tu cachorro aprenderá y estará listo para explorar el mundo exterior contigo.