Con la llegada del verano, las altas temperaturas hacen que el cuidado de nuestras mascotas, en especial los perros, sea esencial. Los canes son muy vulnerables al calor, por lo que es esencial que sepamos cómo cuidarlos para evitar males mayores. En este artículo encontrarás todo lo necesario para saber cómo cuidar a tu perro en verano y mantenerlo en perfectas condiciones.
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Evita los paseos en las horas más calurosas del día
Los perros necesitan hacer ejercicio y salir a pasear todos los días. No obstante, durante los días más calurosos del verano, es esencial que evitemos los paseos en las horas centrales del día, cuando el sol está en su punto álgido y el asfalto puede quemar sus almohadillas. La mejor opción es salir temprano por la mañana o por la noche, cuando las temperaturas son más suaves y el paseo será mucho más agradable para ambos.
Dale una dieta adecuada
En verano, los perros necesitan una dieta que les proporcione la energía suficiente para hacer frente al calor y mantenerse hidratados. Opta por alimentos húmedos y frescos, como verduras y frutas, que contienen una buena cantidad de agua y nutrientes que tu perro necesitará para mantenerse en forma. Además, es esencial que tu perro siempre tenga agua fresca y limpia disponible. No se la dejes al sol y renueva varias veces al día si es necesario.

Evita dejar a tu perro en el coche
A todo el mundo le gusta llevar a sus mascotas en el coche, ya sea para ir al veterinario, a la playa o de vacaciones. Sin embargo, debes tener en cuenta que el interior de un coche cerrado puede alcanzar temperaturas muy elevadas en poco tiempo. En un día caluroso, aún con las ventanillas abiertas, el interior del coche puede volverse peligrosamente caliente para tu perro en muy poco tiempo. Si no puedes evitar transportar a tu perro en coche, asegúrate de dejar las ventanas parcialmente bajas, evita el sol directo y lleva agua y una toalla fresca contigo. En todo caso, procura no dejar a tu perro solo en el vehículo.
Proporciona un lugar fresco y sombrío
Los perros necesitan un lugar fresco y sombreado donde descansar durante los días más calurosos de verano. Si tu perro vive en casa, asegúrate de que tenga un lugar donde pueda descansar sin pasar calor, evita que esté cerca de ventanas grandes o miradores que reciban la luz del sol. Si tu perro vive en el exterior, coloca su caseta bajo un árbol o en un lugar donde la sombra le proteja en las horas de sol más intenso. Proporciónale una tonelada de agua fresca y cambia varias veces al día.
Protégelo de los parásitos
En verano, los parásitos como las garrapatas y las pulgas proliferan y son un problema muy común en animales, incluyendo nuestros perros. Por eso es importante proporcionar a tu perro una protección adecuada contra estos parásitos. Consulta con un veterinario sobre cuál es el mejor collar o tratamiento para proteger a tu perro de estos molestos insectos.
Baños refrescantes
Un baño fresco puede ser la mejor forma de refrescar a tu perro durante un día de sol radiante. No obstante, debes tener en cuenta que no debes bañar a tu perro con agua muy fría ya que puede ser contraproducente. Utiliza agua fresca y un champú adecuado para no irritar su piel.
Observa a tu perro y acude al veterinario si observas algún síntoma de cansancio o malestar
Los perros son capaces de aguantar mucho más que los humanos, pero aun así, no debemos dejar que se excedan en su esfuerzo. Si observas que tu perro está más cansado de lo normal, ha perdido el apetito o bebe agua en exceso, llévalo al veterinario para una revisión. Pueden ser síntomas de algún problema que deba ser tratado de inmediato.
Nota final
Cuidar a un perro en verano no es difícil siempre y cuando sigamos estos consejos. Esencialmente, debemos prestar atención a su alimentación, hidratación y entorno, además de evitar pasear en las horas más calurosas del día. Si mantenemos estas precauciones, nuestros perros podrán disfrutar plenamente del verano como cualquier otro miembro de nuestra familia.